[Escucha este texto]- O Balcón de Lin-dar-Aixa que daba al valle del Río Darro y se veía a lo lejos la ciudad.
- Una vez que hemos pasado por la Sala de Dos Hermanas (Alhambra. Sala de las Dos Hermanas) y por la Sala de los Ajimeces (Alhambra. Sala de los Ajimeces), se llega a este mirador con ventanas bajas para sentarse en el suelo.
- El arco y las ventanas de los lados están rebajadas para poder tumbarse y mirar el jardín.
- Se llama así porque da sobre el patio del mismo nombre (Alhambra. Patio de Lindaraja).
- Parece ser que todo el complejo de los Leones se llamaba Cuarto de Aixa, en honor a alguna favorita del sultán.
- En los documentos de la Alhambra la Sala de Dos Hermanas y todos sus aposentos se llamaba La Daraxa.
- Sin duda este sería el lugar de retiro favorito del sultán donde descansaría y a la vez estaría oyendo música y canciones.
- Desde aquí podía contemplarse todo el Albaicín, después los cristianos cerraron el jardín, impidiendo su vista.
- En el mirador de Lindaraja, se puede leer el siguiente poema: Yo soy de este jardín el ojo fresco (...) En mi, a Granada ve, desde su trono.
- El mirador de Daraxa o Lindaraja es uno de los espacios de todo el recinto con mayor riqueza decorativa, siendo uno de los lugares preferidos en época de Carlos V.
- Este reducido espacio era hasta el siglo XVI un pabellón abierto al paisaje, sobre un jardín bajo.
- En su decoración interior, además del repertorio de zócalos alicatados, probablemente los más primorosos de la Alhambra, muestra destacadas yeserías policromadas, recientemente restauradas, con composiciones geométricas y epigráficas en torno a un arco ciego de mocárabes.
- El espacio interior del mirador se cubre con un techo de cristales de colores, ensamblados en una estructura abovedada de madera, a modo de linterna cenital. Es el único ejemplar de estas características que se conserva en la Alhambra, ha sido restaurado recientemente. En el Mawlid de 1362 Ibn al Jatib describe un techo con similar estructura en el Mexuar (Alhambra. Mexuar).
|
|