| Plato nazarita. Siglo XIV. Alcazaba | |
[Escucha este texto]- Fue declarado Monumento Nacional en 1931.
- Se ha podido documentar la presencia de una ocupación humana continuada
que abarcaría desde el neolítico final, edad del cobre y Bronce Pleno,
hasta el siglo XIX.
- La Mota se articula en tres conjuntos desde época islámica: La Medina donde se encontraba la Mezquita Mayor, zona residencial y área comercial, El Alcázar último bastión defensivo y residencia de las autoridades y El Arrabal barrio fuera del recinto amurallado.
- La fortaleza de Alcalá se asienta sobre un cerro de 1.029 metros de altura.
- Una extensión de 3,84 hectáreas.
- Un conjunto de ATALAYAS que se conservan en buen estado y que datan de los siglos VIII,XII y XV, constituyeron la "red de comunicaciones entre esta ciudad y la Alhambra" y en contacto con otros castillos de la comarca.
- A 1.033 metros sobre el nivel del mar, y a 80-100 metros respecto de la ciudad que se encuentra a sus pies.
- El cerro de la Mota presenta una forma elíptica en su parte amurallada.
- Con la ocupación islámica y el inicio del proceso de encastillamiento
del cerro, se produce el desarrollo continuado del conjunto amurallado y
de su tejido urbano. Los musulmanes levantaron una ciudad cuyo trazado
siguió las pautas propias de la época califal y almohade. En ella
destacarían edificios como la alcazaba militar o la mezquita aljama.
- Sin embargo, y a pesar de la evidente huella andalusí, la Fortaleza de hoy es producto principalmente de las reformas arquitectónicas que realizaron los castellanos, a partir de la conquista, en 1341.
- Alfonso XI, interesado en que este estratégico lugar dependiera exclusivamente de la Corona, fundó una Abadía de Patronato Real con jurisdicción propia e independiente de cualquier diócesis, al tiempo que la dotó de especiales privilegios como la exención de impuestos, hecho que, indudablemente, repercutió en una migración de nuevos pobladores a la zona, sobre todo, a partir de la conquista de Granada en 1492.
- En los ciento cincuenta y un años que transcurrieron entre la conquista de Alcalá y la del Reino de Granada, Alcalá, situada en primera línea de la frontera, jugó un importante papel estratégico-militar, como lugar de partida para la toma del reino nazarí, así como centro económico al servir de puerto para que cristianos, musulmanes y judíos pudieran reunirse a comerciar, con total seguridad personal, excepto cuando se trataba del comercio de caballos, armas, pan y plata por la importancia de estas mercaderías en una situación de peligro y dominio.
- Pasado el dominio musulmán, la Mota comenzó a perder sus funciones como recinto fortificado, para ir abriendo sus murallas y desplegar su población por la ladera oriental. Este proceso culminó a principios del siglo XIX, cuando la antigua ciudad quedó totalmente despoblada.
- En la segunda mitad del primer milenio antes de Cristo el Calcolítico se da en la Fortaleza de la Mota, donde se han hallado un hoyo de poste de cabaña y un silo de almacenaje.
- También se da la cultura Ibera pues se ha encontrado una prensa con drenaje preromanos.
- La presencia romana son los aljibes, una muralla de sillar y morteros encontrados en el interior de la Iglesia Abacial de la Mota.
- De época visigoda existen restos a nivel religioso-funerario, en un momento en que el área se sacraliza y se hace camposanto. Numerosos enterramientos excavados en la roca son el único testimonio de esta época.
- En la primera época musulmana, la califal, se creó todo el cinturón de murallas que rodea la ciudad, y tal vez las del arrabal de santo Domingo, que, con una extensión de 2,70 hectáreas.
- La fortaleza la formaban tres líneas de muralla con un acceso por la parte oriental con siete puertas consecutivas (hoy tan sólo tres y restos de otras dos). Entre las puertas destaca la de la Imagen, situada en la torre del mismo nombre o del cañón. Constituye hoy el paso principal de la fortaleza. Dos puertas importantes son también la del Peso de la Harina y la de las Lanzas modificadas en época cristiana. Con ella conecta la Puerta del Arrabal Viejo o de Santo Domingo.
- El acceso a la medina se realizaba por un camino que conserva parte de su enladrillado musulmán en opus spicatum, y que dividía la primera de la segunda línea de murallas, dedicada a proteger este acceso.
- Este acceso estaba dividido en dos tramos mediante la Puerta de la Imagen o de Santa María, de época nazarí del mismo tipo que la de la Justicia de la Alhambra y un poco anterior a ella, puerta de las denominadas "de aparato" por su monumentalidad y vistosidad.
- La tercera línea de muralla, la que protege el arrabal de Santo Domingo, es la más reciente, y se caracteriza por poseer una cimentación en sillar labrado, del que arranca un cuerpo en mampostería que en algunos lugares conserva un revestimiento de sillar. También mencionar que esta muralla baja en zigzag en el terreno más inclinado, para pasar a tener torres en la parte más llana.
- La segunda muralla intermedia que protege los accesos es de sillar, y es la de menor longitud de todas.
- La primera muralla, que delimita la medina, es la más antigua, viéndose sillares de grandes dimensiones que bien pudieran ser ibéricos o visigodos, y se caracteriza por levantarse desde la misma roca natural, adaptándose a la orografía del terreno.
- Esta primera muralla posee un camino de ronda que la circunda en toda su extensión.
- La Alcazaba contaba con tres torres: la del Homenaje, la de la Campana y la Torre Mocha que delimitaban el patio de armas de la Alcazaba.
- La Alcazaba situada en la parte nordeste, en el punto más alto de la ciudad, a 1033 metros, su planta es triangular con una torre en cada vértice y varios aljibes en su interior, uno en el Patio de Armas y otro en la Torre del Homenaje. La adaptación al terreno es total, al edificar las torres sobre las propias rocas naturales, haciéndola más inaccesible al enemigo.
- El acceso se realiza por la torre del Homenaje, en cuya parte inferior se abre un pequeño pasillo cubierto por una bóveda de sillar apuntada que descansa sobre una moldura de cuarto circular convexa. Un arco de herradura apuntado muy restaurado nos da paso a un pasillo en doble recodo, cubierto por una bóveda de ladrillo apuntada, ya de época cristiana, que desemboca en el Patio de Armas. Este sistema de ingreso era más económico que el tradicional de arco flanqueado por dos torres y de no menos eficacia defensiva, pues la parte de ingreso, reducida, al estar en el interior de la torre y no en su frente, quedaba dominada desde el adarve de la muralla inmediata y la terraza de la torre.
- Tres accesos diferentes. El acceso desde la medina, ya mencionado; un acceso en el muro de poniente, que también desarrolla un paso en recodo más sencillo; y otro en el lado Este de la Torre del Homenaje, hoy tapiado, que daba acceso a la segunda línea de murallas.
- El recinto fortificado contaba con siete puertas de las que sólo quedan tres.
- El visitante se encuentra primero con la Puerta de las Lanzas, remodelada en tiempos del renacimiento.
- La Puerta de la Imagen, de paso entre la fortaleza y el arrabal, conserva sin embargo su estructura islámica, con dos arcos de herradura y una bóveda apuntada. En el siglo XVI albergaba una imagen, de ahí su nombre.
- La Puerta de la Cárcel, de gran importancia arquitectónica. Esta fue muy reformada en el siglo XIV, tras el asedio en el que fue dañada, reformándose sus bóvedas por alarifes mudéjares. Fue dañada por la explosión de un polvorín durante la dominación francesa.
- Desde la conquista de Toledo por Alfonso VI en 1085 muchas fortificaciones se reforzaron o se crearon. La Alcazaba debió reformarse en esta época (siglo XII), ya que responde a una estructura típica almohade con accesos en recodo y doble recodo, y una torre del Homenaje de gran altura, que los almohades implantan en al-Andalus.
- Una larga calle denominada en época cristiana Despeñacaballos (La Mota. Calle Despiernacaballos), que parte desde la Plaza Alta, conduce a la alcazaba. En ella todavía se puede observar restos del enladrillado musulmán del suelo, que sigue el tipo Opus spicatum romano. Esta calle hace un quiebro justo antes de llegar a la puerta por la que se accede a la alcazaba, por lo que suponemos que existió una torre en ese lugar estratégico.
- La medina o ciudad civil se extendía por todo el área amurallada.
- La zona residencial, con viviendas (La Mota. Viviendas) y vías de acceso.
- Gracias a la conservación de diferentes Padrones de la ciudad, se ha
podido conocer el nombre de numerosas calles de la antigua ciudad, así
como quienes habitaban en ella. Por lo general, el trazado de las calles
es bastante sinuoso y estrecho, con la presencia de algunas calles
ciegas. Destacan en especial, los caminos de ronda interiores, que
recorren el perímetro de la muralla, así como algunas calles que
articulan de forma reticular la trama urbana. Calle Despeñacaballos (La Mota. Calle Despiernacaballos), la
Calancha, del Preceptor o del trabuquete son algunos ejemplos de ello.
- Al ser la Mota un recinto amurallado (La Mota. Murallas), necesitaba infraestructuras que garantizaran el suministro de agua, y víveres de la población, así como la evacuación de las aguas residuales. El abastecimiento se garantizaba con una amplia red de aljibes y pozos distribuidos por todo el cerro, tanto de propiedad privada como pública. La red de saneamiento de la ciudad se articulaba en tres niveles diferentes. En primer lugar el interior de la vivienda. El segundo nivel, el sistema que canalizaba los líquidos desde el interior de la vivienda hacia la propia calle y, por último, desde las diferentes calles y plazas hacia el exterior de los tramos de muralla. Tres niveles de evacuación. Los aljibes eran, en su mayoría, subterráneos, excavados en la roca, y en ellos se almacenaba el agua procedente de la lluvia. En ocasiones, su interior se impermeabilizaba con pintura roja a la almagra, fabricada con oxido de hierro, que evitaba las filtraciones e impedía su deterioro. En el recinto de la antigua ciudad amurallada, existen aljibes de diferentes épocas, de tradición romana, islámicos, con formas y tamaños diversos (circulares, de piedra, excavados en la arcilla, elípticos, rectangulares). Junto a estos, también es evidente la presencia de diferentes pozos y veneros de agua, que captaban el líquido que filtraba a través del propio roquedo del cerro. Una vez abandonada la ciudad, se utilizan como osarios y vertederos.
- El espacio público, consistente en edificios como el baño, la mezquita, el zoco, y un área palatina.
- El área palatina pudo estar situado donde hoy se encuentra la Iglesia Mayor Abacial y la Plaza Alta.
- El alcázar-palacio de los Said (La Mota. Palacio fortificado de los Said), algunas de cuyas torres fueron derribadas en 1582, estaba situado frente al costado meridional de la iglesia, cerca del arco de la puerta de entrada a la plaza.
- La mezquita estuvo situada cerca de la actual Iglesia, aunque en las excavaciones no se han encontrado estructuras.
- La existencia del Arco del Peso de la Harina lugar donde se pesaba y tasaba la harina, da a entender que el área comercial de la Alcalá musulmana debió situarse cerca de esta puerta, que da acceso a la Plaza Alta.
- El mercadillo o zoco musulmán que tiene lugar en el interior de la ciudad, suele situarse cerca de las puertas, sobre todo cuando la clientela es urbana y rural conjuntamente.
- Frente a esta área se encuentra la zona residencial compuesta por viviendas particulares y sus vías de acceso, que ocuparía el resto de la ciudad.
- La antigua ciudad se dividía en cuatro barrios o arrabales; el Viejo o de Santo Domingo, el de San Francisco, al que daba nombre una iglesia del mismo nombre, situada en la Placeta de San Francisco, rincón típico del barrio medieval. El arrabal de San Bartolomé, al SE y el arrabal de San Sebastián, al SO, junto a la Puerto de Santiago.
- El arrabal de santo Domingo, se duda sobre su creación en época califal. Lo más seguro es que se creara entre los siglos XI y XII, debido a la buena situación que estaba atravesando Alcalá. Con el aumento de la población la ciudad se queda pequeña, y ésta sale de la medina para vivir en una zona periurbana denominada dawahi, que a amurallarse pasa a denominarse arrabal o rabad. A este espacio urbano se le dota de una muralla, formando la tercera línea, de una mezquita, situada en la actual iglesia de Santo Domingo, y de diferentes accesos. Este arrabal fue reformado en los siglos XIII y XIV reforzándose sus muros. La muralla del arrabal parte desde la Puerta de las Lanzas, bajando en dirección sur en zigzag, para pasar a tener torres y puertas conforme el terreno es menos escarpado. El lienzo desembocaba en la torre de la Cárcel, y solo tenía una puerta de acceso hasta 1492, cuando los vecinos del lugar solicitan la apertura de una segunda puerta.
- El arrabal es un núcleo urbano casi autónomo, con su cerco propio, anexos al núcleo central y con casi todos sus elementos. Los únicos elementos de unión a la medina eran la cerca general, la mezquita mayor, a la que los fieles debían acudir los viernes a la oración, y el zoco.
- Respecto a las calles de la Alcalá musulmana deben coincidir con muchas de las de época cristiana. En las excavaciones realizadas se han encontrado calles que alternan el empedrado castellano y el enladrillado musulmán, síntoma de la reutilización viaria. Se mantuvieron dos de las calles principales, la que conduce desde la alcazaba a la Plaza Alta, denominada en época cristiana Despeñacaballos, y la calle que conduce desde la Puerta de la Imagen a la Puerta del Peso de la Harina, denominada Albaicín en época cristiana.
- La necesidad de crear edificios como salas de justicia, tiendas, escribanías, casas consistoriales, y lugares públicos como plazas. En un primer momento algunas torres defensivas fueron destinadas a albergar estas funciones, y otras se arrendaban a los vecinos para que las usasen como cuadra, taller o almacén.
- La Casa de Cabildo o Ayuntamiento, que según un documento fechado el diecinueve de agosto de 1420, que hace referencia a una reunión entre los miembros del Consejo, el alcaide y el recaudador del diezmo y medio de lo morisco, cita como lugar de reunión una torre cerca del Cañuto. "Estando ayuntados cerca de la placa d"esta dicha villa, encima de la torre mocha que es encima del cannuto, e cerca de la pennula que es en la dicha placa" En 1492 aparecen reuniones en la Torre del Rey, lugar donde "se acostumbra faser el concejo los señores", y en algunas ocasiones, en la Iglesia de Santa María. Vemos como el concejo no tiene una sede fija, y va alternando diferentes lugares, ninguno lo suficientemente apropiado para esta función, hasta que en 1544 se construye el edificio definitivo junto a la Iglesia Abacial.
- Las nuevas Casas de Cabildo se edificaron junto a la iglesia en 1544, tienen dos plantas, patio porticado por uno de sus lados, y una amplia galería que da a la Plaza Alta.
- La Capilla del Deán es un edificio de estilo gótico isabelino, y parece que fue una de las capillas del claustro de la anterior iglesia.
- Entre estos edificios se crea una pequeña plaza que todavía conserva parte de su enlosado gótico.
- Las Carnicerías se sitúan en la Calle Albaicín.
- Un nuevo Alhorí Bajo o Pósito (La Mota. Alhorí Bajo) se construye en el barrio Nuevo, pegado a la muralla del Arrabal Viejo.
- En 1501 los Reyes Católicos autorizaron al alcaide de la fortaleza de La
Mota para que hiciese un reloj a partir de la campana de la Torre de la
Vela (La Mota. Torre de la Campana) algo acorde con esos tiempos
modernos; y dejaron, a criterio del Concejo, la colocación del mismo en
un lugar más adecuado.
- La construcción más significativa fue la Iglesia Mayor Abacial. En 1531 el abad Diego de Avila decidió el derribo del templo gótico del siglo XIV, mandado construir por Alfonso XI, y la construcción del actual, terminado en 1627.
- El centro urbano de la ciudad lo constituía la Plaza Alta, frente a la fachada meridional de la Iglesia Mayor de Santa María. Esta plaza es el núcleo económico y mercantil de la ciudad, y en ella se localizan los oficios y las tiendas, es lugar de emplazamiento de puestos móviles de venta o mercadillos.
- En torno a ella se concentró la nobleza alcalaina, construyendo sus palacios, así como algunos edificios representativos, como el Hospital y la Casa de la Justicia.
- Se intenta ennoblecer y engrandecer por parte del concejo, que piensa en comprar y demoler las casas de Fernando de Madrigal, lo que provoca un pleito entre ambos. En las probanzas del pleito vemos las transformaciones urbanísticas que se estaban realizando, y había obras que se consideraban más precisas su terminación antes que iniciar las mejoras en la plaza, como la de la entrada del Vino, que estaba sin terminar, debido a la falta de dinero.
- Se necesitaba reparar un trozo de adarve en el Arrabal Viejo así como continuar el arreglo de la cerca de la Torre Nueva.
- Se extiende más allá del recinto amurallado, en busca de unas mejores condiciones de vida. Es este el principal factor de abandono de la ya vieja ciudad.
- El Pilar de los Álamos, la Fuente de la Tejuela, la Fuente de la Mora y el Convento de San Francisco son ejemplos de la dualidad urbanística que se mantenía en Alcalá durante el siglo XVI.
- Una de las casas más nobles de la ciudad más destacadas se encuentra junto a la alcazaba, y consta de zaguán de entrada, un patio porticado de pequeñas dimensiones al que dan todas las habitaciones, bodega, cuadra, y varias estancias destinadas a zona privada, diferenciadas del resto por poseer una pavimentación más noble, incluso hay empedrados en algunas casas con representaciones figurativas.
- Una de las características fundamentales y más curiosas de las viviendas de la Mota es la existencia de un gran número de lagares, tinajas de vino y bodegas, algunas de ellas excavadas en la roca. Esto se debe al gran auge que tuvo la producción de vino en Alcalá desde el siglo XVI, de gran fama y que llegó a tener el privilegio de ser el único vino que se podía vender en Granada durante tres meses al año.
- A partir de la Calle del Salto accedía a la ciudad por la Calle de los Mesones, hoy acceso para coches, y llegaba a la Puerta de Santiago, por la que entraba el ganado.
- El otro acceso desde la Calle del Salto era un camino entre murallas, lleno de puertas y torres, al estilo nazarí, tal y como vemos en la Alcazaba de Málaga. La primera puerta que encontramos es la de las Lanzas, aunque hay restos de una puerta anterior a ésta, concretamente el arranque del arco. Esta Puerta de las Lanzas debe su nombre a que este lugar se reunían las milicias alcalainas, siendo construida en el reinado de Enrique IV y modificada en época de Carlos V, encontrándose abierta bajo una torre. La siguiente puerta es la de la Imagen o de Santa María, la más monumental de todas y de origen nazarí. Sobre esta puerta se levantaba la Torre de Santa María, de varias plantas y de función pública, al albergar la Chancillería de Granada en la epidemia de peste que en 1524 asoló Granada. El tramo entre estas dos puertas se denominaba Calle de las Entrepuertas de Abajo.
- El lateral izquierdo está recorrido por un antepecho o falsabraga,
denominado Adarvillo de la Moya (La Mota. Adarvillo de la Moya).
- Pasada
la Puerta de las Lanzas, a la derecha, estuvo el Albaicín (La Mota. El
Albaicín), un barrio elevado, con numerosos talleres artesanales,
comercios y algunas instituciones, como el Hospital del Dulce Nombre de
Jesús y la Casa de la Mancebía.
- El último tramo de este camino, que partía de la Puerta de la Imagen, e denominado Albaicín. A la derecha se situó la Carnicería, y a la izquierda una puerta de acceso al Arrabal Viejo o de Santo Domingo. Por encima de la carnicería hubo una torre denominada Torre del Trabuquete, debido con toda seguridad a la existencia de un arma de este tipo, especie de catapulta. La Puerta del Pendón estaba emplazada antes de la del Gabán (La Mota. Gabán), y de ella sabemos que su aspecto era de estilo gótico por algunas descripciones. La Puerta del Peso de la Harina, bajo la torre del Gabán, es el último acceso al recinto que desemboca a la Plaza Alta.
- En la "Vista de Alcalá la Real", acuarela que Pier Baldi hizo para Cosme III de Medicci en su viaje por España y Portugal, podemos ver el aspecto de Alcalá la Real a finales del XVII, concretamente en 1668. A pesar de ser de finales del XVII, el aspecto del recinto amurallado no debe ser muy diferente del que tuvo en el XVI. Destaca la buena conservación de las murallas y torres, aparentemente, y la supremacía de la Iglesia Abacial sobre el resto de las estructuras. También podemos observar que la población se ha establecido en el Llano. Las torres ubicadas en el primer cinturón murallas tienen varios pisos, y parece que se superponen a otros edificios con numerosas ventanas abiertas al sur. Poco podemos ver de las calles de Alcalá, al ocultarlas las murallas y torres. La acuarela, sin mucho detallismo, da la imagen de una Alcalá donde la estrechez y el constreñimiento de sus calles y edificios denotan todavía cierta influencia musulmana.
- El Arrabal de Santo Domingo, el más antiguo, su urbanismo debió estar muy condicionado por la orografía del terreno, muy pendiente. Dentro del arrabal las viviendas y otros edificios se debieron disponer en terrazas, con estructuras superpuestas y conservando en gran parte su origen musulmán. La Iglesia de San Domingo, parroquia, es el gran edificio y eje del Arrabal, comenzándose a edificar con la conquista de Alcalá en 1341. En la parte alta del recinto, las cuevas naturales utilizaron como cuadras, almacenes, lagares, etc., e incluso existe un pasadizo subterráneo que comunica con la base de la torre del Homenaje.
- Este arrabal comunicaba con el recinto superior a través de dos caminos. Uno llevaba la Puerta de la Imagen a través de calles en rampa que serpenteando hacían más cómoda la subida, y el otro, más directo, comunicaba con la alcazaba a través de una calle que partiendo de la Puerta de Zayde ascendía hasta llegar a la Torre de la Cárcel. A partir de este punto, la calle se cubría con una bóveda de cañón y tras recorrer unos 60 metros se llegaba hasta la Torre del Adarve y a la Plaza Alta, a este tramo abovedado se le denominaba el Cañuto. Destacar la existencia de aberturas en la muralla de este arrabal, destinadas a evacuar agua. A la izquierda de esta puerta hay otra que comunica el camino fortificado con el Arrabal Viejo. De la última puerta partirían los lienzos de muralla que rodeaban la cima. A lo largo del tiempo han sido muy modificados y en gran parte destruidos. Originalmente serían de tapial, aunque luego se revistieron o sustituyeron por lienzos de mampostería. Estaban dotados de torres circulares cuadradas, entre las que habría que destacar la ya mencionada Torre de la Cárcel.
- Pronto se manifiesta el deseo de los vecinos de los arrabales de iniciar sus ventas y transacciones comerciales en la zona recién construida, y no subir a la plaza por más comodidad, a considerarla "fría airosa, lugar áspero y de mucha falta de agua". Una medida de urgencia adoptada por el Cabildo fue la construcción de la Puerta Nueva, que permitiría la salida al Barrio del Adarve, en la parte meridional de la ciudad y anexo al Arrabal de Santo Domingo, y la salida de la ciudad sin tener que pasar por la plaza. Los Reyes Católicos dieron licencia para su construcción en los primeros años del siglo XVI.
- A pesar de esta puerta los vecinos no quedan conformes y los pleitos se suceden a lo largo del siglo. El concejo reacciona penalizando a los comerciantes y artesanos que realizasen ventas fuera de la plaza. "Mandaron y ordenaron los señores justicia regimiento desta ciudad de Alcalá la Real que todos los oficiales desta ciudad de San Juan en adelante se pasen a la plaza desta ciudad y exercer sus oficios e tratar y no traten fuera della ni tengan tienda en otra parte porque la placa e ciudad se noblezca sopena de seiscientos maravedis...". El cumplimiento de estas ordenanza supondría el mantenimiento de la ciudad en la parte alta. A pesar de este ambiente contrario a la primacía comercial de la Mota, la población crece, contándose en 1531 unos 600 vecinos en la Mota, sin contar los de los arrabales.
- Hacia 1560 los pleitos entre el concejo y los vecinos que realizaban ventas en su casas, al negarse a subir a la Plaza, aumentan, y gracias a estos pleitos conocemos algunos datos, como el de la población de los arrabales y el llano, donde vivían unos 2000 vecinos, mientras que la Mota unos 200, casi todos pertenecientes a familias nobles. A finales del XVI la ciudad de la Mota era todavía el centro de la vida alcalaina, con dos plazas, un docena de calles y 219 hogares. La Plaza Baja, la segunda, se encontraba situada tras la Puerta del Peso de la Harina, y era un núcleo comercial de menor importancia.
- Una de las consecuencias de estos pleitos fue el padrón realizado en 1587. Es un documento fundamental para el conocimiento de la situación urbana alcalaina. Sabemos que en esta fecha el número de vecinos de Alcalá era de 1909. Conocemos los nombre de todas las calles de Alcalá, así como su número de vecinos y actividad de éstos. Una de las más nobles era la Calle Ancha o Calancha, que partía de la pequeña plaza situada frente a la fachada principal de la Iglesia Abacial y se dirigía a la Alcazaba. En esta calle se situaba el palacio Abacial, de grandes dimensiones y con jardines particulares.
- También sabemos que la población alcalaina de finales del XVI era fundamentalmente urbana y no rural, al ser la mayoría de sus ciudadanos comerciantes, artesanos, profesionales liberales, siendo los agricultores un porcentaje menor a estos sectores. La posición de Alcalá, como lugar de paso obligado hacia Granada desde Sevilla, Córdoba y cualquier ciudad castellana, hizo del comercio y la aduana la base de la economía alcalaina. Sirva de ejemplo la gran cantidad de mesones que existían entonces.
- En el siglo XVII la Alcalá amurallada queda sólo como barrio principal, al estar ubicado en ella las autoridades civiles y eclesiásticas, y contar con los edificios más importantes, tanto a nivel religioso, administrativo y de gobierno, a parte de seguir siendo el centro económico a base de ordenanzas reales que así lo obligaban. Los pleitos antes citados entre vecinos viejos y nuevos por el mantenimiento del centro comercial en la Mota no cesaron hasta la segunda mitad del siglo XVII, cuando sólo quedaban cuarenta vecinos viviendo en la ciudad fortificada de la Mota.
- Hay intentos de construir edificios significativos en la nueva Alcalá, como es el caso de la construcción de las nuevas carnicerías, ya que la carne se vendía en el llano en lugar no apropiado. En el acta del Cabildo referente a este tema, fachada en 1653, se citan varios de los males que afectaban al mantenimiento de la Mota como centro urbano, entre ellos la ausencia del Alcalde Mayor a celebrar las Audiencias, el poco trabajo de los escribanos, debido a que los alcalainos no tienen apenas necesidad de subir. Finalmente se decide el mantenimiento de la carnicería en la Mota y se acuerda pedir al rey que ordene restituir todas las actividades comerciales y administrativas en el viejo recinto.
- En este siglo la parroquia de santo Domingo de Silos ve cómo su feligresía disminuye, debido a la escasa población que vivía en el Arrabal Viejo o de Santo Domingo y su abandono, por lo que se decide que la Iglesia de la Veracruz, en el Llanillo, comparta las funciones de parroquia. Por otra parte, vemos cómo los nuevos templos, conventos y casas nobles se edifican en el llano, quedando en la parte alta los construidos u originados en el siglo XVI, caso de las Trinitarias, San Francisco de la Observancia, San Blas, San Juan o San Bartolomé. El Convento del Rosario, El Convento de la Encarnación, o el Convento de Capuchinos se edifican en la parte baja. La calle Real y e Llanillo se convierten en las calles principales de la ciudad, concentrándose los edificios civiles, religiosos y administrativos más importantes de Alcalá en torno a estas vías. Tal era la situación que finalmente los miembros del Cabildo dejaron de asistir a la Mota para cumplir sus funciones, y pasaron a reunirse en la Casa que se le alquilaba al Corregidor. Además se constata el interés de éstos por bajar las dependencias de los servicios municipales a la parte llana de la nueva ciudad. En el año 1711 las Casas del Cabildo ya están en la parte baja, concretamente en la calle Real, en una casa alquilada. En 1733 se acomete la construcción del nuevo y actual Ayuntamiento en las inmediaciones del Llanillo, a la par que se edifica una nueva Lonja o centro comercial frente a este ayuntamiento, lo que significó el definitivo abandono de la Mota por parte de la administración y del poder económico.
- Por último, la Iglesia Abacial era el último resto de la antigua ciudad, si bien también se abandona poco a poco, incluso en 1789 se construye un nuevo Palacio Abacial, en el Llanillo. Con la invasión francesa, la Mota se ocupa, retomando por última vez en su historia su papel defensivo y militar, siendo utilizados sus edificios como polvorín, o almacén. La ocupación francesa de la ciudadela, que implicó el desmantelamiento de la iglesia Abacial y su uso como almacén y dependencias militares, de la ciudad. En la retirada, el ejército francés intentó obtener dinero del Abad a cambio de no quemar la iglesia. Debido a lo abandonado de lugar y a la ruina de los edificios que se conservaban, el Abad optó por no ayudar a los franceses, por lo que se quemó la iglesia, designando poco después a la Iglesia de Consolación como sede abacial para los últimos años de vida de la Real Abadía de Alcalá la Real.
- La desaparición de la abadía, a raíz del Concordato con la Santa Sede de 1851, y la instalación del cementerio municipal, agravaron su deterioro. A mediados del siglo XX, el desmantelamiento del citado cementerio y la utilización del espacio como escombrera y almacén significaron el punto de inflexión del abandono del recinto.
- A partir de la segunda mitad del siglo pasado, se comienzan, primero de forma tímida y, posteriormente, de una manera sistemática, los trabajos de recuperación de la Fortaleza de la Mota, hasta conseguir lo que hoy en día es.
- Código PIA 230020008.
- Declarado Bien de Interés Cultural.
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