| Hércules. Reproducción. Museo de la Ciudad | |
[Escucha este texto]- En el inicio de El Llanillo, una de las principales calles de Alcalá la Real, donde se encuentra, en el interior del Centro Social de la Tejuela. En el solar de la antigua Pensión Facundo, en la Calle Tejuela número 12.
- Villa romana, con varios periodos de ocupación, entre los siglos I y III después de Cristo y IV y V después de Cristo.
- Este enclave sufrió dos importantes momentos de destrucción, el primero causado por un incendio y el segundo después de la época del Emperador Constantino I.
- De esta zona provenía el pequeño Hércules de mármol, localizado a finales del siglo XIX y que desde 1925 forma parte de la colección de arte romano del Museo Arqueológico Nacional en Madrid. Altura = 29 cm; Profundidad = 5,90 cm; Ancho = 12 c. Escultura incompleta en la que se representa a Hércules. El héroe
aparece barbado, de pie y desnudo, según la norma habitual para las
esculturas idealizadas. Todo el cuerpo está levemente girado hacia la
izquierda con la cabeza ladeada y la mirada baja. Se apoya en la pierna
izquierda y tiene la derecha un poco retrasada con relación al resto del
cuerpo. Los hombros y el torso están muy marcados, presentando un
aspecto ancho y musculoso. La escultura, al señalar estos aspectos,
quiere presentar con el mayor realismo posible la fuerza y vigor del
cuerpo de Hércules, paradigma por excelencia de la fuerza, el valor y la
entereza. El pelo está tratado a base de rizos cortos y simétricos, lo
mismo que la barba. Aunque no se conserva, llevaría la maza o clava en
la mano derecha y en la izquierda la piel de león apoyada en el tronco
de un árbol. Atributos por excelencia de Hércules, son la clava o maza, su arma
favorita, que se hizo él mismo, y la piel de león, fiera a la que
consiguió matar en el Citerón y con la que, según Apolodoro, cubría su
cuerpo. Con estos símbolos aparece la mayoría de las veces en las
representaciones artísticas griegas y romanas. Para la estatuaria de
Hércules se siguen patrones clásicos griegos que evolucionan hasta los
últimos tiempos del Imperio Romano. La escultura que aquí presentamos,
de una calidad técnica y artística evidente, es una imagen cultual
venerada en algún recinto privado de la Bética.
- Tras de varios años de excavaciones en los que han surgido numerosas piezas arqueológicas importantes.
- Con varios paneles didácticos.
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