En el centro retablo neoclásico, del siglo XIX, de San Pedro Pascual, obispo que fue de Jaén que fue hecho prisionero en Granada y que siempre que se entregaba rescate por él prefería se librara con aquel dinero a otros cautivos, finalmente fue martirizado en 1300.
El retablo tiene un lienzo con San Pedro Pascual rescatando cautivos de finales del siglo XVIII obra del autor local José Carazo.
En la mesa del altar, imagen de la Virgen de la Cabeza, Patrona de la Diócesis.
A la derecha retablo neoclásico con imagen de Santo Toribio.