Fue fundada en el año 1614 por el jurado Gonzalo Muñoz de Velasco.
Se accede a ella mediante una portada articulada sobre un arco de medio punto ceñido por pilastras decoradas, y en cuya clave se ostenta el anagrama JHS.
En el frontón de la Portada aparecen representadas tres de las virtudes, la Fe, la Esperanza y la Caridad.
En la reja que cierra el paso a la Capilla hay una inscripción mariana en latín, "Mariam non tetigit primum peccatum".
Hay un altar con frontal de azulejos con motivos ornamentales que se avienen con los de la bóveda, sobre el altar, se encuentra el Retablo de la Capilla, de estilo barroco, y cuyo centro se encuentra ocupado por un relieve anónimo, en el que se representa el Entierro de Cristo.
En el relieve aparecen las figuras de la Virgen María, la Magdalena, José de Arimatea y Nicodemus. Éstos últimos son los llamados Santos Varones.
Los lienzos colocados en los laterales del Retablo son anónimos y representan a la Inmaculada, que se encuentra colocado en el ático del Retablo, San Juan Bautista, San Telmo y Santo Domingo.