Pertenece a la parte correspondiente a la ampliación de al-Hakam II.
Es una de las más bellas en lo que a composición se refiere.
El vano se compone de un arco de herradura ciego que sirve de descarga y que se encuentra enmarcado por un alfiz.
Sobre él, hay un conjunto de arquillos también de herradura e igualmente ciegos, si bien éstos se encuentran entrelazados.
Cada uno de ellos está decorado en su interior con distintos motivos geométricos pintados.
A cada lado de la puerta, hay dos pequeñas ventanas cubiertas con celosías; vanos que se abren en sendos arcos polilobulados en los que destaca su profusa decoración geométrica, detalle que se repite en todo el conjunto de la puerta.
Cabe mencionar que este acceso estuvo tapiado hasta comienzos del siglo XX, momento en que la Mezquita fue restaurada por el arquitecto Ricardo Velázquez Bosco (Burgos, 1843 - Madrid, 1923) con la ayuda del escultor Mateo Inurria (Córdoba, 1867 - Madrid, 1924).