Se trata de una torre albarrama erigida por el Maestre Santiaguista Lorenzo Suárez de Figueroa, a finales del Siglo XIV-inicios del Siglo XV.
Cumplía las funciones defensivas y logísticas, con saeteras en la fachada y un almacén destinado a las reservas para un largo tiempo.
Mide 26 metros de alto por 13 de ancho, lo que define una proporción de esbeltez de 2:1.
Con estructura a base de sillares a soga y tizón en zócalo, de cantería labrada en esquinas, contornos de huecos y ménsulas de matacanes, y de tapial en el resto de los parámetros.
El grueso de sus muros es de 2,75 metros.
En los días claros y despejados, desde su cubierta se puede divisar Sierra Nevada.