Es una especie fanerógama perteneciente a la familia de las Cactaceae.
Es endémica de Guanajuato e Hidalgo en México.
Es una especie común que se ha extendido por todo el mundo.
Se ve amenazada en la naturaleza, pero la propagación generalizada y la popularidad en el cultivo ha reducido la demanda de las poblaciones silvestres.
Es una especie de cactus columnar con racimos de tallos, creciendo hasta los 5-15 m de altura, la planta deriva generalmente a no ramificada, de ser incapaz de soportar el peso de las ramas laterales fácilmente.
Su característica más llamativa es la de los pelos largos, de color blanco que posee y que le sirven para protegerse del sol.
La capa de pelo hace que muchas plantas aparezcan casi blancas como la nieve (sin embargo, ocultan los pelos las fuerte y numerosas espinas de color amarillo).
Las flores son de color rojo, amarillo o blanco, si bien puede no florecer hasta los 10-20 años de edad.
Es muy popular en el cultivo de cactus, y se cultiva por su aspecto lanoso.
Prefiere un buen drenaje del suelo (más que muchos otros cactus), y un mucha luz solar, que fomenta el crecimiento del pelo.