Distribución: se distribuye principalmente a lo largo de toda la región mediterránea. Y en la península se encuentra preferentemente al sureste y en buena parte del cuadrante sudoccidental.
Hábitat: orillas de ríos y arroyos, barrancos, ramblas. En general cerca de cursos de agua.
Etimología: la palabra latina Nerium deriva del
vocablo griego Neros, húmedo, aludiendo a su apetencia por lugares
donde abunda el agua.
El epíteto específcico "oleander", parece ser la
contracción latina de "olea", olivo (por la forma de sus hojas) y
"dendron", árbol.
Arbusto perennifolio, uno de los más bellos de la región mediterránea, de hasta 6 m de altura.
Crecimiento rápido.
Hojas lanceoladas y enteras, muy coriáceas, de 6-12 cm, verde grisáceas.
Flores de 3-4 cm de diámetro, generalmente de color rosa aunque también blancas, rojas y amarillas.
Normalmente florece en primavera y continúa la floración hasta la llegada del otoño.
Fruto de 8-16cm de color pardorrojizo, con las semillas provistas de un penacho de pelos.
Exiten variedades de hoja variegada (verdes con bordes amarillos claros).
Planta muy tóxica, cuyas hojas contienen sustancias digitálicas utilizadas como componentes de productos raticidas.
Todas sus partes son venenosas. La ingesta de cualquiera de sus partes tiene efectos venenosos.
Es una planta muy tóxica que produce la muerte
del hombre y los animales que la ingieren. Evitar que los niños tengan
contacto con ella.
La adelfa es una planta sumamente tóxica. No consumida por el ganado, a
veces, ha sido utilizada como parasiticida y como raticida. A pesar de
estos riesgos es ampliamente usada como ornamental, decorando el seto de
multitud de autovías y jardines de España.
Existe la anécdota de que en España en tiempos de la ocupación francesa
por las tropas napoleónicas, los españoles invitaban a los franceses a
abundante comida. En los preparativos de la carne, se usaron estacas
peladas de adelfa para ensartarla y asarla, lo que provocó una gran
mortandad en la tropa napoleónica.
Las adelfas son plantas que no resisten las heladas frecuentes.
Poseen una gran capacidad de rebrote, lo que sin duda es una adaptación a las avenidas y riadas que suelen producir en areas de clima mediterráneo.
Almacena gran cantidad de agua en sus hojas y tallos que la hacen de muy dificultosa combustión.
Desarrollan unas raíces muy profundas para alcanzar el agua a gran profundidad, pueden alcanzar hasta los 50 metros.
Cuando forman zonas boscosas llamadas adelfal se crean una especie de túneles debido a que al estar tan próximos unos de
otros, estos matorrales apenas si dejan pasar la luz, por lo que los
tallos se han alargado y las hojas sólo aparecen al final de ellos
intentando captar los rayos del Sol.
El adefal más importante de toda la península es el Adelfal de Cuadros en Bédmar (Jaén) y uno de los principales de Europa.