Sitios > Europa > Unión Europea > España > Extremadura > Provincia de Badajoz > Mérida
Historia de Mérida
La ciudad de Augusta Emerita, fue fundada por orden del emperador Octavio Augusto en el año 25 a. C., para acoger a los soldados de las guerras cántabras, veteranos de las legiones V Alaudae y X Gemina.
Desde el principio fue una ciudad amurallada, en la que tenían especial interés los edificios de espectáculos públicos, (Teatro, Anfiteatro y Circo), además de los Foros, templos, termas, embalses y demás edificaciones que se fueron integrando en la ciudad, con los edificios de viviendas y las plazas públicas. Especialmente relevante fue el puente romano sobre el Guadiana, uno de los más largos del imperio, que se convirtió en un importante nudo de comunicaciones acorde con el rango de la ciudad.
La llegada de los visigodos continuó manteniendo su importancia.
El nuevo emirato, para sobrevivir, hubo de apoyarse en grandes ciudades ya existentes, como Córdoba o la propia Mérida.
Luego, el califato, redujo la influencia de la ciudad en favor de otra nueva, creada por los propios emeritenses: Batalhús, la actual Badajoz.
Tras su conquista por los leoneses en 1230, no le fue restituida la sede arzobispal y quedó relegada a mera cabeza de una provincia ligada a la Orden de Santiago.
Paso obligado hacia Portugal de reyes y nobles, la villa permaneció en esa nómina de pueblos con papeles secundarios en el devenir del nuevo Reino de España.
Esos mismos caminos que portaban noticias y riquezas también acarrearon las funestas consecuencias de crueles guerras mantenidas con Portugal o la Francia Napoleónica.
Será un nuevo invento, la locomotora, el que, en pleno siglo XIX, invite a la ciudad a bailar, de nuevo, en el concierto de la historia española.
Desde 1993 Mérida ha recobrado su grandeza ya que en diciembre de ese mismo año fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, siendo éste un reconocimiento de su proyección turística, uno de sus motores económicos.