El encharcamiento es su peor enemigo, ya que le hace perder las hojas inferiores.
En verano regarla una vez por semana, mientras que en invierno los riegos se producirán cada 15 días.
La savia es irritante.
Árbol siempreverde de 6-8 m de altura en cultivo, con la copa simétrica, aparasolada.
Hojas agrupadas hacia el final de las ramas, palmaticompuestas, semicoriáceas, con 8-15 folíolos oblongo-obovados, de 10-30 x 5-10 cm, enteros o dentado-ondulados, de base obtusa o cordada y ápice obtuso o cortamente acuminado, de color verde brillante. Pecíolo de 30-60 cm de largo; pecíolulos de 5-10 cm de largo.
Inflorescencias terminales, en racimos digitados de espigas que sobresalen del follaje, dispuestas a la manera de los radios de un paraguas, pudiendo medir hasta 130 cm de longitud cada una.
Flores distribuidas a lo largo de la espiga y agrupadas en cabezuelas de 11-14 flores, sésiles, rodeadas por un involucro de 4 brácteas. Cáliz ausente; corola con 11 (-15) pétalos, subulados, de 3-4 mm de largo, caducos, rojos o a veces rosados. Androceo con 11 (-15) estambres, rosados. Ovario con un estilo corto.
Fruto en drupa globosa, de unos 7 mm de diámetro, de color negro en la madurez.
Es originario de Australia, Nueva Guinea e Islas Salomon.
Las hojas adultas suelen ser de mayor tamaño y tener mayor número de folíolos que las jóvenes.