Fue licenciado en derecho por la Universidad de Granada donde ejerció como tal.
En 1868 descubrió la Cueva de los Letreros, situada en la Sierra de Maimón Grande de Vélez Blanco, donde además de pinturas rupestres se encontró el Indalo en otra cueva.
Fue decano de la facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Granada, siendo catedrático de Historia Universal.
En 1866 fue elegido miembro asociado de los Institutos Arqueológicos de Roma, Berlín y París.
Fue también inspector de antigüedades.
Perteneció a la Academia Sevillana de Buenas Letras y a la Real Academia de Bellas Artes de Nuestra Señora de las Angustias de Granada.
A partir del año 1875 su vida transcurre en Granada y Baza donde su familia poseía la finca "La Colonia", hasta que se va a Madrid, donde fallece el 10 de abril de 1884.