En 1780, un amigo de Volta, Luigi Galvani,
observó que el contacto de dos metales diferentes con el músculo de una
rana originaba la aparición de corriente eléctrica.
En 1794, Volta comenzó a experimentar con metales
únicamente, y llegó a la conclusión de que el tejido animal no era
necesario para producir corriente.
Este hallazgo suscitó una fuerte controversia
entre los partidarios de la electricidad animal y los defensores de la
electricidad metálica, pero la demostración, realizada en 1800, del
funcionamiento de la primera pila eléctrica certificó la victoria del
bando favorable a las tesis de Volta.
1801 El físico efectuó ante Napoleón una nueva
demostración de su generador de corriente. Impresionado, el emperador
francés nombró a Volta conde y senador del reino de Lombardía.
El emperador de Austria, por su parte, lo designó director de la facultad de Filosofía de la Universidad de Padua en 1815.
Muere el 5 de marzo de 1827.
La unidad de fuerza electromotriz del Sistema Internacional lleva el nombre de voltio en su honor desde el año 1881.