En el siglo XVII fue convertida en posada y pensión que duró hasta el siglo XIX.
Por esta casa recibe el nombre la plaza.
El descubridor de esta historia es D. Nazario Moreno Mendoza que posee una fotocopia de una escritura de compra-venta de la casa datada en 1775, y en ella se especifica que era una posada y los lindes de ella.
En aquella época la Plaza del Gallo se llamaba Plaza de la Morería.
En el solar de dentro de la casa hay un sótano en piedra con una bóveda de medio punto.